Nos acercamos a la segunda versión de la Alfombra Verde Respira, organizada por la Plataforma Ambiental PIENSA VERDE. Este evento, realizado con éxito por primera vez el 2021, reunió a más de 70 personalidades bolivianas que lucieron trajes de gala confeccionados con material reciclado y/o reutilizados por los 65 mejores diseñadores del país con el objetivo principal de recaudar fondos para combatir los incendios forestales en Bolivia, considerando la coyuntura. Este año, previo a la Alfombra Verde, se realizaron talleres de transferencia de información técnica denominados “Rumbo a la Alfombra Verde”, donde se compartió, con el sector privado, información científica sobre: (1) Bosques y biodiversidad, alternativas para el sector productivo y (2) Salud y Medio Ambiente, que está siendo generada por ONGs que son parte de la Plataforma Piensa Verde, así como de otros expertos en ambas temáticas.
El primer taller se llevó a cabo el pasado martes 17 en la ciudad de Santa Cruz, en el auditorio de la CAINCO, donde se trató el tema: “Bosques y biodiversidad, alternativas para el sector productivo”, con el objetivo de invitar a empresas del sector productivo a trabajar con un enfoque colaborativo destinado a: (1) conocer el impacto de la deforestación y los incendios forestales para la sociedad, (2) comprender la importancia de mantener los bosques en pie para el bienestar de la población y la productividad del sector agropecuario, y (3) discutir sobre soluciones de largo plazo que aumenten la productividad en el sector agropecuario de forma sostenible sin afectar el funcionamiento de nuestros ecosistemas, promoviendo así un cambio transformador en el país.
Durante este taller, Natalia Calderón; Directora Ejecutiva de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN) mencionó que: “En los últimos 20 años se han quemado en promedió más de 3,5 millones de hectáreas anualmente de vegitación arbustiva, pastizales y bosques. En Bolivia más de 90% de los incendios forestales son de origen antrópico, es decir son consecuencia de las actividades humanas.”
Los expositores sobre este tema fueron: Natalia Calderón de Fundación Amigos de la Naturaleza , Juan Carlos Ledezma de Conservación Internacional Bolivia, Roberto Vides de Fundación para la Conservación del Bosque Chiquitano y Fidel Hoyos quienes compartieron información científica y su experiencia con relación a la temática y la relevancia de modelos de producción más sostenibles. Por otro lado, un panel de expertos tos a la cabeza de Carlos Hugo Molina de CEPAD Bolivia , Ben Evans de la Embajada Británica , Santiago Velez de IICA Bolivia y Julio Silva de CAINCO discutieron soluciones tecnológicas de largo plazo que aumenten la productividad en el sector agropecuario sin comprometer los bosques. Finalmente, contamos con la participación de Juan Pablo Zeballos, bombero voluntario quien nos contó su experiencia combatiendo el fuego en la Chiquitanía.
Roberto Vides, del la Fundación Conservación del Bosque Chiquitano (FCBC) también mencionó que: “Para hacer conservación tenemos que hacer producción que sea responsable, sustentable y con un enfoque regenerativo… La ganadería regenerativa busca imitar procesos encontrados en bosques y pastizales naturales para mantener ecosistemas productivos saludables, suelos fértiles y buen microclima local, además de dar mayor beneficio económico.”
Los resultados del taller fueron muy satisfactorios pues se evidenció la intención del sector privado para trabajar de manera conjunta en favor de la conservación y manejo sostenible de los bosques bolivianos.
Finalmente, Julio Silva de CAINCO resaltó: “Estamos trabajando con el sector financiero y otros actores, en la mesa de finanzas sostenibles, para generar instrumentos apropiados que incorporen prácticas y tecnologías sostenibles, y evitar incentivos perversos que financian la ampliación irresponsable y no controlada de la frontera agrícola”
El segundo taller se llevo a cabo el viernes 20 de mayo en la ciudad de La Paz, en el auditorio del Banco de Crédito donde se trató el tema: “Salud y medio ambiente”. Este taller tuvo la presentación de Lilian Painter de WCS Bolivia quien expuso sobre el enfoque de una sola salud, después Tania Briceno de Conservation Strategy Fund nos mostró con datos reveladores la importancia de áreas protegidas y espacios naturales para la salud humana; Oscar Loayza de WCS Bolivia reveló el impacto de la minería ilegal de oro en la amazonía boliviana, con una presentación que dejó al auditorio realmente alarmado. Finalmente la presentación del Dr. Rodolfo López de SerLibre Terapias Integrales nos mostró los efectos de la pandemia para la salud mental.
Durante este taller, una de las participaciones más destacadas fue la de Lilian Painter; Directora Ejecutiva de WCS-Bolivia, quien mencionó: “La OMS estima que 1 de cada 4 muertes prevenibles se deben a la degradación ambiental, sobretodo la contaminación y los desastres naturales, pero también debido a enfermedades zoonóticas (…) 80% de la tierra y los océanos muestran una clara modificación por parte de los humanos. La degradación ecológica aumenta el riesgo global del brote de enfermedades zoonóticas originadas en la fauna silvestre y también tiene un impacto sobre la calidad del agua, del aire y la nutrición”.
El panel de expertos, conformado por el Dr. Alfredo Laime Responsable del Programa Nacional de Gestión en Salud Ambiental del Ministerio de Salud y Deportes Bolivia, Rocío Chaín, Oficial de Programas del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo – PNUD Bolivia y Linda Ramírez Jefe de Responsabilidad Social Empresarial Salud y Bienestar Bagó, discutió sobre la importancia de la salud ambiental para el bienestar de la población, mostró los avances del sector público y privado en relación a esta temática y se evidenció el camino a seguir para integrar la temática ambiental a la agenda de salud en Bolivia.
Oscar Loayza de WCS-Bolivia, también destacó que: “Nuestro país es el único en la región que permite actividades mineras en sus áreas protegidas. Sólo limitadas por las restricciones de su zonificación. Esto se refleja en el incremento significativo de actividades en casos como, por ejemplo, Apolobamba donde hay alrededor de 150 operaciones mineras, unos 394 derechos mineros otorgados o demandados, pero sólo 18 actividades con licencia ambiental o el caso de Madidi donde hay más de 20 operaciones mineras, alrededor de 94 áreas mineras otorgadas o demandadas, pero sólo 11 con alguna licencia ambiental”
Este taller evidenció la urgente necesidad de trabajar de manera conjunta entre el Estado, el sector salud y las organizaciones de la sociedad civil de área ambiental la hora de abordar la salud desde una sola óptica ya que la salud humana, la sanidad animal y la salud de nuestro medio ambiente están intrínsecamente conectadas y son interdependientes. Estamos convencidos de que abogar por ecosistemas saludables nos llevará a un futuro sostenible.
Ambos talleres abren las puertas hacía la “Alfombra verde respira”, y fueron posibles gracias al apoyo del Banco de Crédito de Bolivia, Laboratorios Bagó, Conservation Strategy Fund, Embajada Británica y CAINCO.